Es extraño, muy extraño, tan extraño, pero te extraño. Lo más extraño de este casi extraño, es que extrañándote como te extraño, te haya dicho que no te extraño, cuando preguntaste si te extrañaba. Este es un hombre extraño. Todas las mujeres son extrañas, pero entre todas las extrañas, eres la más extrañas de las extrañas...”Con mucha tranquilidad y con una paz que logra transmitir por medio de sus ojos azules, declama Albeiro Ramírez una parte de lo que será Palabreando, su cuarta edición de poesía.Un juego de palabras que le llena el corazón y el alma de recuerdos y alegrías, por medio de un escrito, en el cual es una palabra la protagonista y a la vez, la que logra hilar y dibujar el poema final.Dice que tiene los años que le faltan por vivir y es verdad, porque aunque ya ha pasado por los treinta aparenta menos. Pero la edad o el tiempo es lo que menos importa, cuando logra describir lo que para él, es la poesía.“Lo es todo, está en cualquier espacio, en cualquier rincón, el poema siempre está en el alma. Hay que sacarlo de esa parte elitista donde se cree que el poeta tiene que ser de ese grupo bastante intelectual”, dijo Ramírez.Agrega que tal vez puede estar equivocado, que es el tiempo el que finalmente dé la razón, pero que el poema más sensible está plasmado en una hoja de papel, en un momento cuando el estado de ánimo está floreciendo.Es de Dosquebradas, vive en el municipio y actualmente hace parte de la fundación teatral Paradigma que se ubica en el campestre B, pero trabaja en Pereira, ya que confiesa que es difícil mantener el arte en el municipio.“Muy complicado, yo vivo en Dosquebradas y mi trabajo es en Pereira y desafortunadamente la mayoría de los artistas de Dosquebradas tienen que abrirse campo porque aquí no hay apoyo cultural, hasta el momento en todo este tiempo nunca lo he sentido, experimentado, vivido, entonces es triste porque hay muchas cosas por hacer aquí”, enfatizó este joven poeta.Sin embargo, esto no es impedimento ni excusas para llevar a flote lo que más le apasiona. Habló de las tres ediciones de “Exploradores de Ilusiones”, la primera la realizó en el 2001, la segunda en el 2006 y la tercera en el 2008, todas obtenidas como él mismo lo dijo, con sus propios esfuerzos y anhelos de ver reflejado sus sueños.“Hoy son tres ediciones, tres mil libros y ninguno ha pasado por una librería, eso lo hace un cuento aún más grande porque estamos hablando de una labor por medio de la cual el contacto con las personas, es la forma de llevar mi obra”, comentó Albeiro.¿Cuál es el poema que más recuerdas? Se ríe y calla por un momento. Dice que es difícil contestar esa pregunta, porque en cada escrito está plasmado la alegría, el sentimiento, se convierte en un hijo que es tan importante y tan especial como los demás.Por eso cada poema queda al gusto o a la elección de quien lo escucha y lo contempla.Recuerda por unos cuantos segundos y empieza a mostrar unas fotografías en las cuales aparece sobre las tablas un personaje bastante extraño, su rostro es verde y la manera como está vestido lo convierten en un ser de un mundo de hadas. Sonríe, es amigable, pero lo más especial de todo es que ha viajado por casi todo el país llevando un mensaje de paz :Un día la paz se extravió. ¿Donde estará?, preguntó la curiosidad. Nadie la ha visto, comentó la soledad. Si vuelve bien y si no también, murmuró el orgullo. El problema es de ella, sostuvo la indiferencia. Es horrible, agregó la vanidad. Desaparezca para siempre, vomitó el odio. La extraño, suspiró la melancolía. ¿Y si no vuelve?, pensó la inocencia. Me hace falta lloró la ternura. Ella regresará afirmó el optimismo. Le daremos la bienvenida, bailó la felicidad...La paz siguió extraviada viajando por el universo, encontró su reposo en un caminante. El verbo se hizo carne. Hoy la paz es un libro sagrado, que toca los corazones transformada en amor.Ese es Epil, explicó Albeiro Rámirez, el personaje que lo ha acompañado alrededor de unos ocho años en su camino de declamación y cuentería, otra de sus múltiples expresiones que lo llevan a ser cada vez más auténtico en lo que hace.Construyendo sus sueñosPor el momento Albeiro Ramírez continúa puliendo sus sueños y viviendo del arte, que aunque en ocasiones es difícil, se aprende a vivir de él.En este momento estudia tercer semestre de Comunicación Social y Periodismo en la Unad y primer semestre de Licenciatura en Teatro, una capacitación que le otorgó el Ministerio de Cultura.“En este momento estoy terminando de capacitarme con la universidad de Antioquia, con un grupo de 14 pereiranos que fuimos seleccionados por el Ministerio de Cultura, es una licenciatura que estuvieron buscando los grandes maestros”, indicó. Como poeta sigue enamorando la vida, sintiendo y llevando en alto la poesía, aquella musa inspiradora de caballeros. El poeta le propuso: Cásate conmigo, quiero que seas mía, que tu espíritu acompañe mi alma y que tu esencia acaricie mi piel.Quiero ser libre, volar sin ataduras, cruzar el infinito:Contestó la poesía. (Tomado de LA TARDE.COM)